Colombia
El barranquillero compartió en entrevista con Mix Radio cómo fue su experiencia dentro del reality, las polémicas que enfrentó, la relación con los demás participantes y el apoyo familiar.
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Creativa Digital
El barranquillero Altafulla se convirtió en el ganador de La Casa de los Famosos 2 Colombia, y compartió en entrevista con Mix Radio detalles sobre su paso por el programa, su relación con otros participantes, las polémicas en las que estuvo envuelto y cómo vivió esta etapa de su vida.
Altafulla explicó que durante su estancia en el reality sintió incertidumbre frente al apoyo del público y se sorprendió al ver la recepción que tuvo en las votaciones. “Yo nunca supe que la vuelta estaba así. Nadie me lo hizo sentir”, dijo. Aseguró que su propósito fue enviar un mensaje claro: “¿A quién vamos a exaltar? ¿A una persona que ha estado haciéndonos daño, que ha faltado al respeto, o a un man que ha venido dando un mensaje bonito?”
Sobre su relación con Emiro Navarro, explicó que lo conocía desde antes del programa y que incluso le pidió apoyo con las votaciones. “Para mí, Emiro siempre fue el ganador. Tú ves todas mis entrevistas, yo nunca lo posicioné, nunca lo nominé”, comentó.
Aunque lamentó que Emiro se haya dejado influenciar por actitudes ajenas, valoró que fue el único que se despidió al salir. “Nos hemos visto un par de veces, no hemos podido hablar, pero sé que en algún momento se va a dar”.
Uno de los puntos claves para Altafulla dentro de la casa fue el acompañamiento psicológico. Recordó que al principio no creía, pero cambió de opinión tras vivir momentos de tensión. “Yo decía: ‘¿yo qué voy a ir a un psicólogo? ¿Acaso estoy loco?’”, relató. Sin embargo, después de su primera sesión, sintió un alivio: “Fue como si me hubieran reseteado. Empecé a ir todos los días, hablábamos de mi vida afuera, ni siquiera de la casa”.
Frente a los señalamientos de acoso, Altafulla aseguró que fue un episodio difícil. “Me clavaron una palabra y que ‘degenerado’. Yo pensaba en mi mamá y decía: ‘esto tuvo que haberla vuelto mierd*’”, dijo. Explicó que trató de defender su postura sin atacar a nadie, pero fue señalado como “llorón” y “víctima”.
Altafulla destacó el papel de su madre durante todo el proceso. “Mi mamá tiene ‘culo de carácter’, pero que ella me haya dicho ‘estoy orgullosa de ti’… Yo dije: algo tengo que estar haciendo bien”, relató. También mencionó que le hubiese gustado vivir este momento con su abuela, quien siempre lo apoyó cuando otros dudaban de él en casa.
Sobre su relación con Karina, participante del programa, confirmó que actualmente están juntos. “Karina es un sol. En estos días ha sido mi apoyo, todos los días está esperándome en el hotel”, contó. También mencionó que su primera salida fue con Luisa Fernanda W y Pipe Bueno. “Tal cual, es mi mujer ahora mismo”, aseguró.
También comentó que su hermana Laura ya era amiga de Karina desde antes, a través de Instagram, lo que ayudó a fortalecer la conexión entre ambos fuera del reality. Para él, el vínculo con Karina ha sido clave en este proceso de adaptación tras el encierro: “A mí me gusta estar feliz, y si el cuerpo me lo pide, hay que dárselo, obviamente con responsabilidad y respeto”.
Altafulla compartió una anécdota sobre una fiesta en la que consumieron una bebida llamada “mero macho”, la cual le causó un fuerte malestar al día siguiente. “La primera vez que probé eso estábamos en una rumba. Salió Tim y dijo: ‘Tengo un protector hepático, una vaina para que no nos dé guayabo’. Y nos acabamos la botella entre cinco”, recordó. La fiesta terminó a las seis de la mañana con un fuerte dolor de cabeza.
Contó que al día siguiente no pudo dormir y que, en medio del malestar, decidió salir a correr. “Yo llamé a Jeimison y le dije: ‘Papi, yo no sé a mí qué me está pasando’”, dijo entre risas. Fue ahí cuando Jeimison le comentó que Tim Briceño le había dado un poencializador sexual.